Día: 16 de octubre de 2012

CAMINOS DE IDA Y VUELTA (LA AVENTURA DE ESCRIBIR)

 

No podemos estar matizando todo el día lo que decimos y muchas veces hay que confiar en las palabras y la buena fe de la gente en vez de rebuscar y querer sacar la idea más rocambolesca. No quiero excusarme ni dar explicaciones a nadie, simplemente aclarar lo que pasa por mi cabeza.

Tengo treinta años y he pasado casi la mitad (13) fuera de mi casa. Mi vine a estudiar a Sevilla con 17 años en un lejano otoño del año 2000, y, desde entonces he estado moviendo por ahí. Con dos paradas claves: aquí, a los pies de la Giralda, y en mi pueblo, Arcos de la Frontera. Mis experiencias son mías, y, junto con la educación de mis padres, es lo que llena mi cabeza y me hace pensar como pienso, y las que faltan para seguir llenándola, claro…

Creo que todas las experiencias son buenas, no llamo a ninguna mala, porque considero que todas nos enriquecen: unas para saber que camino seguir y otras para saber que camino no hay que seguir. Me refiero a las experiencias, no a como se pasan. Por supuesto que creo que hay malos momentos.

He vivido nueve años en  Sevilla, tres en Cádiz y uno en Écija. No sé si yo soy muy fácil o me han tocado ciudades muy buenas, porque en todas he estado bastante bien. Todas me han ofrecido mucho y tengo un sentimiento especial por ellas, mayor que por cualquier otra. Tengo un poco de todo de cada una  y las llevo dentro. Siempre con la maleta cargada, para ir allá donde sea y volver al punto de partida.

Soy un gaditano-sevillano, andaluz y español y siempre será así, porque creo que uno tiene que saber siempre de donde viene antes de a donde va. Saber cuales son los extremos de este yin-yang que es la vida, de esos viajes de ida y vuelta que darás en el futuro.

En fin, la vida…